a mí, sí

Este blog nace para dar cabida a mis intereses, mis aficiones, mis ideas, mis pensamientos, lo que me apetezca escribir, lo que me apetezca opinar en un momento determinado. Política, cine, literatura, deporte,...
Si a alguien desea participar con sus comentarios, será un placer, para mí, leerlos. Una única norma, la misma que me aplico a mí mismo. Cualquier opinión será bienvenida. Lo mismo una que su contraria...
Pero no me permitiré ni permitiré la mala eduación, lo soez, lo chabacano, lo faltón, lo vulgar...
Todo eso, en "aunque a nadie le interese", está proscrito.
Bienvenidos.

domingo, 29 de enero de 2012

Angustia

En ocasiones pasan días sin que apetezca escribir. Otras veces, tienes un rato libre y acometes esa entrada que tenías pensada hace semanas. Pero también están, como hoy, los días en que sientes que tienes que explicar lo que has sentido al ver una noticia, una escena cotidiana o leído un artículo.

Este último es el caso que me ocupa en estos momentos. Me refiero al artículo que firmaba hoy Cristina López Schlichting en La Razón. Su título: "Llenaré tus días de vida".

Lógicamente no lo voy a reescribir aquí. Para eso está el enlace. Lo que quiero comunicaros es la angustia y el dolor que he sentido ante el drama de una familia francesa. Otro de tantos que se dan por todo el mundo. Unos nos llegan, pero la mayoría, no.

La madre se llama Anne Dauphine Julliand. Estaba en cinta de su tercer hijo cuando observó que la segunda, Thais, de poco menos de dos años, empezó a torcer un poco un piececito al andar. El diagnóstico, terrible, abrumador. Leucodistrofía metacromática. Dos meses después, la pequeña ya no andaba.

En no mucho tiempo, la niña perdió el habla, el oído, la vista. También el tacto... El bebé que estaban esperando nació con la misma enfermedad.

Es aquí donde lo que yo escribo se aleja, hasta el infinito, de lo que aparece en la columna. Temo, de hecho, que con esta entrada, este comentario, en realidad, sobre ese artículo, esté pervirtiendo lo que Schlichting nos quiere comunicar.

El artículo es un canto al amor, a la esperanza, al coraje, la valentía, la amistad... Un homenaje para esa familia destrozada, pero, aún así, optimista. Os recomiendo encarecidamente su lectura.

Pero por hermosa, bella, que sea esa moraleja, debo confesar que en mi ánimo ha cundido una angustia, un desasosiego, un dolor, que me han obligado a sentarme ante esta pantalla.

Admiro a esos padres. Admiro a tantos otros con historias semejantes. Mas confieso que yo me veo incapaz.

Es difícil anticipar de lo que somos capaces. Nunca podemos decir, con certeza, cómo reaccionaríamos ante dramas de este calibre. El ser humano es sorprendente. Muchas veces, incluso para sí mismo.

Pero en estos momentos, cuando ya hace un buen rato que acabé la lectura del artículo, siento, aún, una desazón y una tristeza que me supera. No. Yo no me creo capaz de sobrellevar una situación así.

No me creo capaz de levantarme cada día y ver a mi pequeño un poco peor que ayer. No me creo capaz de seguir adelante sabiendo que no hay esperanza. No me creo capaz de darle la felicidad y la alegría que los padres de Thais y Azylis, la primera, ya en el Cielo, hicieron sentir a esas niñas.

Simplemente, no me creo capaz de soportar tanto dolor.

No voy a seguir. No he sido justo con vosotros. Me he sentido tan mal, hasta el borde de las lágrimas, que he intentado de trasladaros un poco de ese sentimiento, de esa angustia. No, no he sido justo.

Pero es que es tan injusto todo...

miércoles, 25 de enero de 2012

UN PEQUEÑO HOMENAJE PARA EL MIRANDÉS

Se trata tan solo de homenajear un equipo de los que conocemos de toda la vida, pero cuyos resultados tenemos que buscar en las páginas secundarias de deportes.

Su germen se remonta al año 1917, cuando unos alumnos del Colegio Sagrados Corazones funda el Deportivo Mirandés. Posteriormente se llamaría Sporting Club Mirandés y Deportivo S.C. A su desaparición, surgieron dos equipos, el Miranda F.C. y el Blanco y Negro, de cuya fusión surgiría el Miranda Unión Club. Era el año 1922.



Finalmente, el 3 de mayo de 1927, nace el Club Deportivo Mirandés, reuniéndose su primera directiva en un local de baile, "La Perejilera".

El actual campo de Anduva se inauguró el 18 de septiembre de 1949, tras quedarse la RENFE con los terrenos donde se ubicaba el anterior, para construir viviendas.

Su palmarés está adornado con cuatro títulos de campeón. Todos ellos, en Tercera División.



El Mirandés nunca ha llegado a militar en 2ª División. El año pasado estuvo muy, muy cerca. Por mala suerte, no lo logró.

Estos son pequeños retazos del equipo que homenajeo con estas líneas. Los de Miranda de Ebro están haciendo la temporada de su vida. Comandan con absoluta autoridad su grupo de la 2ª División B. Sin duda, pugnará, como el año pasado, por el ascenso a la categoría de Plata por primera vez en su Historia.

Pero lo más hermoso lo está escribiendo en la Copa del Rey. Este Club se ha ganado el cariño y la admiración de toda España. Ha peleado y merecido alcanzar las semifinales, algo que solo el Figueres había logrado anteriormente, militando en 2ª B.



El Mirandés no ha eliminado al Villarreal, al Racing de Santander, al Espanyol, sino que ha sido mejor que el Villarreal, el Racing y el Espanyol. Con una fé ciega en sus posibilidades, en su juego, en su lucha, en su público ha obtenido el premio más importante de su Historia. Disputará a Mallorca o Athletic, en estos momentos juegan, el pase a la gran Final de la Copa de Su Majestad.

Mas éso es únicamente el aspecto deportivo. Ha hecho más. Ha conseguido el respeto generalizado. Se ha ganado el derecho a que seguidores bilbaínos y mallorquines no se consideren  en una especie de semifinal adelantada, convencidos de que el que siga, eliminará al Mirandés y llegará, fácil, a la Final. Se ha ganado, por favor, que no se dé eso por hecho. Tres Primeras ya cometieron ese error.



También ha conseguido algo al alcance, tan solo, de los más grandes. Aquello que ocurre cuando alguien a quien no le gusta el automovilismo pregunta "¿qué ha hecho Alonso?". Lo que sucede cuando se oye a personas que no han visto entero un partido de tenis en su vida "¿ha ganado Nadal?". O "¿qué ha hecho Gasol?".

Ayer no eran ni Alonso, ni Nadal, ni Gasol, ni Contador, ni Marta Domínguez. Ayer fue el día del Mirandés. El día en que mucha gente en España estuvo pendiente de este pequeño gran Club. El día en que personas, como mi mujer, no muy interesada por el fútbol, se van a la cama y ponen la tele, porque "ya queda poco y necesitan un gol más".



Es el día en el que toda España, menos los hinchas pericos, obviamente, iban con los rojillos de Miranda. El día en el que seguidores de muy distintos equipos españoles gritaron gol, como toda Miranda, cuando Infante y Caneda pusieron la guinda al milagro. Gritaron gol con tanta fuerza como al celebrar los propios.

Ayer, muchas personas fueron felices por un rato. No sólo en Miranda. No sólo en Burgos o en Castilla. En toda España.

Lograr eso está sólo al alcance de los más grandes.

jueves, 19 de enero de 2012

CATALATERAPIA

La Generalitat catalana ha elaborado un protocolo con el que se presiona a los empleados de la sanidad pública en aquella Comunidad Autónoma para que utilicen única y exclusivamente el catalán en su trato con el paciente, lo entienda éste o no.

Así lo hemos podido leer en distintos periódicos de tirada nacional, como, por ejemplo, El País.

No se trata de una broma, ni del argumento de una película berlanguiana, es lo que pasa en una región de España en el año 2012.

Es verdad que estamos acostumbrados a la desvergüenza con la que las autoridades comunitarias catalanas dirigen la política lingüística, pero ésto parece demasiado.

¿De verdad pretenden que un médico que habla español perfectamente tenga que empeñarse en emplear el catalán aunque se halle ante un paciente que no entienda esa lengua?

¿Su idea es que, aún entendiendo ambos un idioma oficial común, el facultativo conscientemente se dirija al enfermo en catalán, a sabiendas de que le va a costar hacerse entender, si es que lo logra?

A lo mejor, en las consultas catalanas se puedan escuchar expresiones como las que siguen:

"Señor Martínez, con más motivo debo atenderle en catalán, que sólo le quedan a Usted un par de meses de vida y va a andar muy justo de tiempo para aprender nuestra lengua nacional antes..."

"A ver, señor Pérez, le quedan un par de semanas. ¿Me entiende Usted o se lo explico con manzanas?"

"Que la he dicho que se descubra, señora. No me mire con cara de tonta..."

No me lo puedo creer, os lo juro. Hace falta ser muy paleto o muy malnacido o muy paleto malnacido, para tener una ocurrencia semejante.

¿Es normal ésto?

No, no lo es.

Lo normal es que si por la puerta de la consulta entra un paciente que se expresa en español, el médico le atienda en ese idioma oficial.

Quizá se trata de un nuevo tratamiento médico.

Quizá, efectivamente, no haya ninguna maldad en esta iniciativa.

Quizá, puestos a curar gripes, neumonías, fracturas, bronquitis, eczemas, tumores, sólo pretendan, de paso, curar la peor enfermedad de todas, el desconocimiento de la única y verdadera lengua nacional catalana.

Quizá a todos los métodos curativos que manejan los facultativos de esa Comunidad, escayolas, enemas, antibióticos, radioterapia, quimioterapia, tengamos que añadir, a partir de ahora, uno nuevo, la catalaterapia.

jueves, 12 de enero de 2012

EL PERRO Y SU AMO

Ésta es una pequeña anécdota que me apetece contaros. Quien me conoce sabe que soy un apasionado de los perros. Desde pequeñito, y aún ahora, a mi edad, no puedo cruzarme con uno por la calle sin hacerle un gesto, una carantoña,... ¿Qué le voy a hacer? Yo soy así, para bien y para mal.
Me comentaba mi mujer que, hoy, una compañera de trabajo le contó una pequeña historia.

Un amigo suyo tenía un pastor alemán de diez años. No hace mucho, como un día más, estuvo con el perro paseando, corriendo y jugando. Lo solía hacer a diario.



Esa noche, se acostó, como siempre. Pero ocurrió algo que ya no era tan habitual.

A medianoche, su perro se le subió encima y empezó a lamerle. No era una cosa que acostumbrara a hacer. Menos, una vez dormidos ya. Luego, el animal se fue y el hombre volvió a dormirse.



Por la mañana, cuando despertó, sin embargo no ocurrió lo de siempre. Su pastor alemán no vino a saludarle y él se levantó a buscarle.

El pobre ya no respiraba. Habia muerto por la noche. Su disgusto fue mayúsculo y se echó a llorar. Aún lo hacía mientras lo narraba a la compañera de mi mujer.



Uno no puede por menos que preguntarse, ¿qué sintió el animal? ¿Notó que se estaba muriendo? ¿Qué le hizo ir a despedirse de su amo? ¿Es, como se suele arguir, cosa únicamente de su instinto?

Habitualmente, hay una notable diferencia entre lo que los dueños de perros creemos que éstos saben, o entienden, o piensan, y lo que opinan los que no tienen perro.



A mí, no me cabe duda de que mi perra entiende la mayoría de las cosas que le digo. Sea por el tono, sea porque tras determinados sonidos, palabras, siempre pasan las mismas cosas, sea por lo que sea. Algún día, la dedicaré una entrada para presentárosla.

Pero hoy es el día de ese pastor alemán que, sintiéndose morir en medio de la noche, subió a la cama de su amo y le dijo adiós, a su manera.

¿O, para vosotros, es sólo una casualidad? ¿Qué opináis?

miércoles, 11 de enero de 2012

"SOMEBODY TO LOVE" (QUEEN 2)

Seguimos el repaso a la discografía del mejor grupo de todos los tiempos, que empezamos semanas atrás por las fechas en las que se cumplía el vigésimo aniversario de la muerte de Freddy Mercury. Lo habíamos dejado en el cuarto disco, "A night in the opera", de modo que seguimos, cronológicamente, con el siguiente, "A day at the races".

Otro nombre con homenaje a los Hermanos Marx para este quinto trabajo que se considera uno de los mejores, alcanzando el número 1 en el Reino Unido, Holanda y Japón y el 5 en el Billboard 200 de los Estados Unidos, donde fue su quinto álbum en alcanzar las 500.000 copias vendidas, disco de oro. "Sheer Heart Attack" y "A night in the opera" ya lo fueron anteriormente.

Como exponente de este LP no me queda otra que caer en lo típico y en lo habitual, pero es que en "A day at the races", al comienzo de la cara B, tenemos una de mis canciones favoritas no ya de Queen, sino de toda la historia de la música, "Somebody to love". Escrita por Freddy Mercury, bajo la influencia de Aretha Franklin. llegó al número 2 en la lista de singles en Reino Unido y al 13 en el Billboard 100 de Estados Unidos.



Un temazo múltiples veces versionado y fantásticamente interpretado por George Michael en el Concierto de Homenaje a Freddy Mercury, tras su muerte. La versión que escuchamos es la "Live at the Bowl".


Por si la queréis cantar. Yo lo he hecho muchas veces.

Can anybody find me somebody to love?
Each morning I get up I die a little
Can barely stand on my feet
Take a look in the mirror and cry
Lord what you're doing to me
I have spent all my years in believing you
But I just can't get no relief, Lord!
Somebody, somebody
Can anybody find me somebody to love?

I work hard every day of my life
I work till I ache my bones
At the end I take home my hard earned pay all on my own -
I get down on my knees
And I start to pray
Till the tears run down from my eyes
Lord - somebody - somebody
Can anybody find me - somebody to love?

(He works hard)

Everyday - I try and I try and I try -
But everybody wants to put me down
They say I'm goin' crazy
They say I got a lot of water in my brain
Got no common sense
I got nobody left to believe
Yeah - yeah yeah yeah

Oh Lord
Somebody - somebody
Can anybody find me somebody to love?

Got no feel, I got no rhythm
I just keep losing my beat
I'm ok, I'm alright
Ain't gonna face no defeat
I just gotta get out of this prison cell
Someday I'm gonna be free, Lord!

Find me somebody to love
Can anybody find me somebody to love?


Os prometo que tenía pensado seguir con los siguientes dos o tres discos, pero he cambiado de idea. Esta canción se merece una entrada para ella sóla. Además, tantas versiones como ha habido..., veamos alguna otra.

Por ejemplo, Bonnie Tyler y otros cantantes invitados la interpretaban en la final del programa "Children in Need 2009" desde el Millenium Centre de Cardiff.



En 2010 un grupo de 60 estudiantes de The Hebrew University de Jerusalén hizo una versión que fue muy aclamada, sobre todo, después de las palabras de Brian May, que reconoció que le había puesto un nudo en la garganta. Según May, a Freddy le hubiera encantado. Suficiente para avalarla.



No me quiero extender mucho más. Así quedan balas en la recámara para otra ocasión. Pero para acabar tan típico como empecé, George Michael en el Homenaje a Freddy, de lo mejorcito de aquel irrepetible evento.

viernes, 6 de enero de 2012

Mis Reyes Magos

Sinceridad, sinceridad ante todo para esta entrada. Soy una persona maravillosa, ma-ra-vi-llo-sa. Si no existiera, tendrían que inventarme. Al lado mío, la madre Teresa de Calcuta parecería un bruja perversa y el Mahatma Gandhi, un pandillero navajudo y pendenciero.

Es por ello, sin duda, que los Reyes Magos hayan tenido a bien dedicarme un trato especial. Nada de acumular cuatro regalos birriosos la noche del 5 de enero. Me están dedicando un mes entero. ¿Por qué? Porque yo me lo merezco.



Empezaron hace unas semanas. Exactamente, cuando fui a visitar al óptico para hacer la preceptiva revisión anual. Yo le dejé caer que, por la noche, me costaba leer un poco más en la cama.

- Quizá sean imaginaciones mías.- le dije- Igual no es más que una consecuencia de que, por la crisis, las editoriales hacen los libros con la letra más pequeña, que algo ahorrarán en tinta, y todo resta.
- Vista cansada.- refutó él- Las dioptrías de lejos no te han cambiado, pero de cerca, o sea, para leer, has perdido algo.
- Vamos, que me estoy quedando cegato.
- No, qué va. A tu edad, es normal.
- Vamos, que me estoy quedando cegato porque me hago viejo.
- Nada, nada, no te preocupes.- sonrió- Pero tienes que elegir. O dos pares de gafas o uno con lentes progresivas.

Y ése fue mi primer regalo de Reyes. Unos cristales progresivos que, aún aprovechando mi montura vieja, me cos..., perdón, les costaron a sus Majestades 550 euros del ala.



Pero me fui contento. Con ellas leía mejor, lo que desmontaba mi teoría sobre la disminución del tamaño de las letras.

Aunque me preocupaba un poco que el coche arrancaba y, de la misma, antes de un segundo, ¡zas!, se calaba. Bueno, no sería mucha cosa pero, con el invierno y las heladas en puertas, convenía llevarlo a revisar.

- No sabemos seguro lo que es,- me dijeron- de modo que iremos probando.

Así que me cambiaron los calentadores. Ése fue mi segundo regalo. Unos calentadores nuevos para el coche que me cos..., que costaron a los Magos de Oriente sólo 109 euros.



La pena que no era eso, porque el coche seguía haciendo lo mismo. Así que lo tuve que volver a mirar. Ahí ya, no se esmeraron mucho. Sólo me cambiaron un manguito. No les costó nada, porque ni me cobraron en el taller.

Y marché, contento ya con mis gafas y mis calentadores nuevos.

Sólo que, al fin y al cabo, todavía no habíamos llegado al momento álgido de la Navidad.

¿Qué pasó? Bueno, el coche ya arrancaba estupendamente, a la primera, heladas incluidas. Una maravilla. Pero (siempre hay un pero) descubrí que, cada vez más, el embrague patinaba, sobre todo cuesta arriba. No podía acelerar el coche convenientemente. En llano o cuesta abajo no iba mal. Sólo faltaba. Pero para arriba, no podía.

Aguanté unos días, porque ya me lo olía. Y tampoco quería abusar de Reyes, que ya iba satisfecho con mis presentes. Pero cuando mi mujer me acompañó un día y vio el percal lo dejó claro.

-Así no puedes estar.- me dijo - Hay que volver al taller.

En fin, sin abundar en detalles técnicos. En esta ocasión, Melchor, Gaspar y Baltasar se pusieron de acuerdo y me regalaron un embrague nuevo. ¿Que cuánto tuve que..., tuvieron que pagar? Pués otros 520 euros.



¿No os parece que es para estar agradecido? Cristales progresivos, calentadores, manguito, embrague,... Muy bueno tengo que ser. No lo podéis negar.

Claro que todo esto fue en diciembre. Los Reyes Magos vienen en enero. Yo contaba con que, tan bien se habían portado ya conmigo, no me traerían ya presentes.

Quizá por eso me extrañó cuando este miércoles, anteayer, me monté en el coche para ir a trabajar y, ¡oh sorpresa!, no arrancó. Así, sin más. Llamada a la grúa y vuelta al taller.



Todavía está allí. En la última conversación que mantuve con ellos, ayer a las 18 horas, me dijeron:

- Aún no lo hemos mirado. No sabemos lo que es.
- Pero, al menos, ¿tenemos alguna idea de lo que me pu..., de lo que puede costar a sus Majestades este nuevo regalo?- repuse ilusionado.
- No, - lamentó- depende de lo que sea puede haber bastante diferencia.

Y me quedé tan contento. Está claro que si hablan de "bastante diferencia" no se refieren a "o 15 euros o puede que hasta 50". Pero me quedé con el intríngulis. Espero que mañana, o el lunes a más tardar, pueda informaros de lo que me..., de lo que les supone a mis benefactores este nuevo regalo.

Así que, esta mañana, hemos sacado a la perra en el coche de mi mujer. Hacía mucho que no la llevábamos en él. Más que nada, para que uno de los dos vehículos esté limpio y presentable.

- Le abro un poco la ventana de atrás. - informo a mi mujer
- Si, pero no mucho, por si nos cruzamos con la Guardia Civil. -respondió ella, siempre prudente - Abre también un poco la tuya, la del conductor, que por ahí ya le da bien el aire en la cara.

En eso estábamos, camino de Espinosa, la perra, como es habitual en ella, gimiendo, aullando y cantando. Mi esposa y yo, intentando mantener una conversación por encima del ruido.

Hasta que, de repente, me he dado cuenta de que no se la oía. He mirado por encima de mi hombro. ¿Qué creéis que había hecho?

Pués, por lo que se ve, mi cinturón de seguridad la estaba molestando un poco para llegar hasta la ventanilla. Se habia dedicado a mordisquearlo. Habrá sido como medio minuto. No ha necesitado más para roer el cinturón hasta la mitad.



Estaba claro. Si los Reyes Magos me están colmando de alegrías y presentes durante todo el mes pasado, hoy, mañana del día señalado, tenían que ofrecerme su último detallito.

Así que a los cristales progresivos, los calentadores, el manguito, el embrague, lo que narices impida arrancar a mi coche (¡qué emoción, qué nervios!), añadimos un último presente. Un cinturón de seguridad nuevo para el coche de mi mujer.

Por todo esto entenderéis el comienzo de esta entrada. He sido bueno. Muy bueno.

Ahora bien, cara al año que viene tengo que decidir si me compensa seguir alardeando de tamaña bondad o encarar la vida con un poco menos de Santidad y un poco más de, no sé, maldad, perfidia,...

Por la cuenta que me trae.

miércoles, 4 de enero de 2012

¿Y si repetimos las elecciones?

45 días.

Ése es el tiempo que ha transcurrido desde las elecciones del 20 de noviembre. Bastante menos desde que se ha hecho efectivo el traspaso de poder PSOE --> PP, ZP --> Rajoy, de la oscuridad --> a la luz...



Se podría pensar que, con tan poco tiempo desde nuestra excursión a las urnas, si por mor de algún arte de birlibirloque, mañana por la mañana tuviéramos que repetir las elecciones, no debería haber una excesiva diferencia entre los resultados que entonces se dieron y los que obtuviéramos.

Pués bien. A pesar de la famosa moratoria de cien días que, se supone, concedemos a un nuevo Gobierno antes de empezar a criticarle con denuedo, estoy seguro de que nos encontraríamos con una fuga de votos notable de las filas populares.



El ya comentado anuncio del equipo económico del Gobierno sobre la subida "temporal" del IRPF parece haber pillado por sorpresa a los españoles. Es lo que tiene que se sepa desde hace meses quién iba a ganar. También es lo que tiene que, durante esos meses, hayamos oído una y otra vez que el Gobierno Rajoy no iba a subir los impuestos, que ése no era el camino, que...

Ahora sabemos que todo era mentira. Nadie duda de que el equipo del gallego, cuyos conmilitones gobiernan la mayoría de las Comunidades Autónomas, sabía perfectamente que el defícit real se iba a disparar por encima del 8 por ciento. Si algún Partido conoce hoy mismo, de primera mano, el estado de las cuentas autonómicas españolas es el PP. Lo digo sin entrar a valorar quién y dónde es el culpable en cada caso.

Desde tribunas cercanas a los populares, de hecho, también se ha recibido con recelo e, incluso, disgusto, estas primeras medidas económicas de la nueva nave guía. No es muy complicado extrapolar ese estado de ánimo a nivel del votante de a pie.



Ésto no quiere decir que el PSOE fuera a recuperar parte de lo que ha perdido en noviembre. No están, ahora mismo, para esos menesteres. Pero la fuga de votos popular, estoy seguro, sería muy importante. Quizá hasta el punto de poner en riesgo su mayoría absoluta.

IU no recibiría mucho voto desencantado, pero hay otra formación, que cosecha simpatías crecientes y que, sin duda alguna, sería la receptora de un alto porcentaje de lo que perdiera Rajoy. Hablo de UPyD.



El electorado ya le dió un importante espaldarazo el 20N. Un salto cuantitativo desde los 300.000 votos hasta más allá del 1.100.000. No me equivoco, pondría la mano en el fuego, si digo que hoy, 4 de enero, de repetirse las elecciones, los de Rosa Díez superarían con creces esa cota. Por encima del millón y medio, apuesto. Los españoles no les consideran parte de esa casta de políticos aprovechados, que se miran sólo su ombligo, sus sueldos, sus pensiones, sus prebendas,... Les ven como un partido humilde, honesto, con verdaderas ganas de transformar la política española de arriba a abajo y hacerla más justa y cercana al ciudadano.

Pero las elecciones están recién pasadas. Sólo las de Andalucía se adivinan en el horizonte. Para otras pugnas habrá que esperar aún un rato. De momento, el PP tiene vía libre para hacer y deshacer a antojo.

Lo que pase dentro de unos años, está por ver.

martes, 3 de enero de 2012

LA PRIMERA EN LA FRENTE

No nos engañemos. Que nos espera un añito de Padre y Muy Señor mío lo sabíamos todos. Nadie ignora que la situación es muy mala, incluso crítica.
Era por ello, y por el pésimo bagaje que el anterior ¿Gobierno? lucía, que las elecciones del pasado 20 de noviembre se habían convertido en poco menos que un mero trámite. Sabíamos el ganador. Pocas dudas ofrecía su mayoría absoluta. Tan clara era la situación que, ahora, a toro pasado, sorprende la defensa a capa y espada que Mariano Rajoy hizo de su postura contraria a la subida de impuestos.
Los españoles sabíamos que vendrían muy mal dadas. No creo que un PP advirtiendo de una posible necesidad de incrementar la carga impositiva sobre los ciudadanos hubiera obtenido un resultado mucho peor en los comicios. Máxime, cuando su principal rival, el PSOE, e incluso el tercero en discordia, IU, también defendían esa necesidad.
Pero Mariano negó la mayor. Ha tardado muy pocos días, demasiado pocos, en desdecirse e incumplir tan importante promesa electoral. La excusa ya la tenemos más que oída. El déficit no es del 6 por ciento. Aparentemente, supera el 8.
¡Sorpresón! ¿Alguien dudaba de ésto antes del 20N? ¿Realmente creía el PP que se iba a encontrar con ese 6 por ciento mencionado? ¿Nos quieren hacer creer que se han topado, de sopetón, con él, y, de la misma, haciendo gala de una cintura fantástica, han tenido que modificar las medidas económicas que, por necesidad, ya ha tiempo tenían que tener meditadas? Porque, que iban a ganar lo sabían hace mucho.
No me lo creo.
Ha sido un error de Rajoy el enrocarse en una postura que, sabía, no tenía futuro. Y lo ha hecho consciente de que los españoles estamos tan bajos y desmoralizados por esta situación que, con tal de tener un ápice de esperanza, vamos a aceptar todo aquello que SE nos venga encima.
Pero, en mi opinión, también es un error desde el punto de vista económico. La recuperación tiene que llegar por vía de la demanda. Es imprescindible incentivar el consumo, dejar de sangrar el bolsillo del contribuyente y trabajar con los bancos para lograr que abran el grifo crediticio.
En mi caso, tengo claro que este año tendré que gastar menos. Sospecho que no voy a ser el único. ¿De qué nos sirve una reestructuración del mercado laboral que incentive el empleo si esa mano de obra no es necesaria? ¿Para qué vamos a contratar si, después, nuestra producción no va a ser comprada?
Me temo que hemos comenzado por el mal camino. Justo el contrario que deberíamos seguir. Y lo que mal empieza…